La frase de apertura de Alan Pace durante su presentación oficial el martes en el Auditorio Juan Segura Palomares fue “Iniziamo ora”. El nuevo presidente del Espanyol, estadounidense con doble nacionalidad británica y ex director en Lehman Brothers, expresó su deseo de transformar al club en campeón, comprometiéndose a ser transparente y sin hacer promesas vacías.
Regresa a Barcelona tras tres décadas con la intención de “vivir un sueño y una segunda luna de miel”. Su intervención, aunque ambiciosa, también mostró un enfoque conciliador. Enfatizó la necesidad de una transición, sin desestimar lo que ya funciona, y destacó que contará con un equipo cercano de confianza para gestionar el club.
Pace tendrá en su entorno a dos personas de gran confianza que le ayudarán en su gestión. ¿Quiénes son estos colaboradores clave en su proyecto? Según reveló él mismo, se trata de Antonio Dávila y Bradley Spiby, quienes cumplirán roles específicos. Dávila asumirá el papel de consejero en un Consejo que aún se está formando y que será fundamental en la supervisión de las operaciones en relación a Pace. Por otro lado, Spiby actuará como su mano derecha y representará a ALK, la empresa matriz de VSL. En cuanto a sus trayectorias, Dávila es un experto en gestión deportiva, reconocido por su excelencia académica con un doctorado por la Harvard Business School. Desde 2021, enseña Contabilidad y Control en HEC Lausanne, donde dirige investigaciones sobre innovación y rendimiento en el deporte.
Brad Spiby, un britannico che conosce bene lo spagnolo grazie ai suoi studi a Barcellona, ha una notevole esperienza sia nella gestione finanziaria che sportiva. Prima di ricoprire l’attuale ruolo di vicepresidente della Strategia e Investimenti presso ALK Capital e di Chief of Staff al Burnley, Spiby ha passato 15 anni come docente all’IESE Business School, un’illustre istituzione dove anche Pace ha completato un master. Con Spiby nel team, il Burnley ha siglato un importante accordo di espansione con il Dundee FC, e insieme a Pace, stanno guidando il club inglese verso una nuova era, facendo cessare l’epoca di Chen.
