Claudio Giráldez, coach del Celta, destacó el impresionante desempeño del arquero argentino Paulo Gazzaniga, cuyo rendimiento evitó que su equipo lograra su primera victoria ante el Girona. A pesar de que Borja Iglesias anotó de penalti en el tiempo añadido, Giráldez señaló que, en su opinión, el encuentro debía haberse ganado con mayor facilidad.
Explicó que, a excepción de un tramo entre el minuto 15 y el 30, su equipo mostró un juego muy bueno, controlando las acciones del rival, que habitualmente se apodera del balón frente a otros equipos de LaLiga.
Además, resaltó que generaron numerosas oportunidades de gol de diversas maneras, tanto por el centro como por las bandas y en situaciones de contraataque y a balón parado.
Sin embargo, lamentó la “mala suerte” de que el primer disparo del Girona terminara en gol, lo cual llevó a los suyos a jugar de forma apresurada y caótica, sin tomar decisiones adecuadas. “Esa acción les dio la oportunidad de cerrar el partido, pero lo lógico habría sido que nosotros marcáramos 4 o 5 goles. Gazzaniga brilló en su actuación. No logramos concretar en la última jugada, pero el equipo mostró un buen nivel”, afirmó el técnico celeste, que prefirió no opinar sobre el arbitraje.
Giráldez aseguró que se va con la misma impresión que tuvo en el encuentro contra el Villarreal, cuando también lograron igualar en el tiempo de descuento gracias a un gol de Borja Iglesias. “Logramos el empate al final, pero claramente debimos haber ganado. Este es el rumbo que debemos seguir”, comentó el entrenador, quien también agradeció los cumplidos de Míchel, reconociendo su honestidad y calidad como entrenador, considerándolo un referente a nivel internacional.